Cuando llega la Navidad, los ambientes no serían los mismos sin la presencia de plantas como el Acebo, la Flor de Pascua o el Abeto. Pero también podemos disfrutar de ellas el resto del año. Tan sólo tenemos que aplicar algunos cuidados.

Las especies típicamente navideñas pueden vivir en casa durante todo el año, como cualquier otra especie, pero sin olvidar que muchas de ellas son de exterior y que la calefacción o la sequedad ambiental puede afectarlas de forma negativa.

El Tejo, el Acebo o los Brezos deben mantenerse en terrazas o ventanas e introducirlos en el interior sólo en fechas señaladas. Otras especies, como la Flor de Pascua o el Cactus de Navidad, se integran bien en espacios interiores con los cuidados precisos.

En cuanto a los Abetos, cuando están decorados con adornos navideños conviene situarlos en algún lugar de la casa ventilado y próximo a una ventana. Ya pasadas las fechas de Navidad, y una vez despojados de sus adornos, conviene plantarlos en el exterior para que no se mueran.

La Flor de Pascua tiene como característica su coloración roja, aunque también puede ser rosa, blanca o crema, es muy popular. Necesita recibir sol directo en invierno y luz filtrada en verano. Mantendremos su tierra húmeda durante todo el año.

El Abeto de Navidad debe recibir la luz directa por lo que lo colocaremos cerca de una ventana. El Abeto no puede bailar en el tiesto. Mantendremos su tierra húmeda y lo dejaremos en el exterior de la casa cuando acabe la Navidad. En primavera cubriremos su tierra con cortezas de pino.

El Tejo crece mejor en espacios soleados o de semisombra. Es una conífera con follaje verde oscuro que da pequeños frutos rojos en invierno. Se abona y se poda en primavera y se adapta a cualquier tipo de suelo. Es preciso mantenerla en el exterior.

El Brezo de invierno forma bellos centros de mesa con sus pequeñas flores de color rosa, rojo o blanco, que aparecen entre el invierno y la primavera. Necesita mucha luz con algo de sol directo. Puede vivir en espacios interiores, aunque lo mejor es mantenerla en la terraza con la tierra siempre húmeda.

El Acebo debe adquirirse en viveros ya que es una especie protegida. Sus frutos rojos que brotan tanto en invierno como en otoño, son muy decorativos. Prefiere el sol la sombra empobrece su follaje y tolera cualquier tipo de suelo bien drenado.

El Cactus de Navidad tiene sus hojas carnosas y sus flores magentas brotan durante todo el invierno de cada tallo. Necesita sol directo en otoño y luz sin sol en primavera y verano. Tras la floración ha de regarse poco durante los dos meses siguientes y, volver a regarse en primavera.