Para tener una mantelería de diseño propio basta con que estampemos en la tela cenefas con flores, barras con estrellas, ramas o motivos geométricos. Si nos gusta el efecto podemos hacerlo también en nuestras cortinas, cojines, toallas.

La técnica de la estampación nos permite conseguir de manera sencilla acabados espectaculares en la ropa de casa. Unas estrellas plateadas sobre un mantel liso vestirán nuestra mesa para estas fiestas, unos ositos impreso sobre las cortinas de un dormitorio infantil pondrán una nota alegre y si queremos dar un estilo marino al cuarto de baño vamos a estampar unos motivos de conchas en el visillo de la ventana.

Para realizar una mantelería con estos efectos las telas idóneas son las de lino, algodón y rayón. Elegimos por ejemplo el lino que se pude colorear y lavar. Calculamos tela suficiente para que el mantel cuelgue 40 cm. Dejamos 4 cm más para cada dobladillo. Hacemos las servilletas con piezas cuadradas de 40 cm, más 2 cm para los dobladillos.

Cortamos la tela del mantel y cosemos los dobladillos. Para ello doblamos el tejido, lo planchamos y luego ingleteamos las esquinas. Pasamos la máquina. Señalamos con pegatinas el lugar donde colocaremos cada uno de los dibujos. Procuramos que haya una separación de 40cm entre ellos.

Aplicamos con el pincel sobre el tampón de silicona la mezcla al 50% de pintura acrílica y médium. Retiramos las pegatinas de la tela y con el tampón estampamos. Para que quede mejor planchamos el mantel por detrás, una vez seca la pintura.