miércoles, 20 de junio de 2018

Unidades de medida en electricidad

A la cantidad de corriente eléctrica se le llama intensidad y depende del tamaño del conductor, de la tensión y de la carga. Siempre, cualquier conductor genera una resistencia, que será más pequeña cuanto más grande sea el conductor.

Si la resistencia es elevada se traducirá en calor, lo que se aprovecha en algunos casos para conseguir luz o calefacción. Pero es peligroso que un conductor se caliente, y por esto debe tener el tamaño suficiente para que la corriente fluya sin encontrar demasiada resistencia.

Unidades de medida en electricidad

Voltio
Es la unidad de medida de la tensión. La corriente eléctrica se desplaza a través de un conductor, por la diferencia de carga existente entre los dos extremos. El valor de la corriente doméstica viene siendo 220 V.

Amperio
Es la unidad de medida de la intensidad o cantidad de corriente que pasa por un punto en el tiempo de un segundo.

El Ohmio
Es la unidad de medida de la resistencia. Los materiales, por muy buenos conductores que sean de la electricidad, todos ofrecen alguna resistencia a la corriente eléctrica. La cantidad de electricidad que circula por un conductor es inversamente proporcional a la resistencia de éste.

El Vatio
Es la unidad de la potencia y nos indica el consumo de un momento dado. Habitualmente utilizamos la unidad kilowatio/hora para medir los trabajos eléctricos mediante el contador.


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domingo, 24 de enero de 2016

Nociones básicas de electricidad

Todo lo que nos rodea y nosotros mismos estamos compuestos por diferentes partículas llamadas protones (carga positiva), electrones (carga negativa), y neutrones (carga neutra).

Los electrones se encuentran en la periferia del átomo y por eso son de fácil liberación. Un cuerpo se electrifica o se carga eléctricamente cuándo pierde, (que se carga positivamente), o gana (que se carga negativamente) electrones. Cuándo estas cargas se mueven a través de un conductor se forma lo que llamamos una corriente eléctrica.


La electricidad necesita materiales conductores para desplazarse. Materiales como metales, el agua, la tierra o el cuerpo humano. Todos sabemos que la electricidad puede causar grandes daños al circular por nuestro cuerpo. Por el contrario el vidrio, el caucho, el aire o la mayoría de los plásticos dificultan o impiden el paso de la corriente eléctrica, hablamos de materiales aislantes.

En las centrales eléctricas se genera la corriente para el uso doméstico. Allí se convierte la energía mecánica que se obtiene mediante otras fuentes de energía primaria, en energía eléctrica. Para que pueda desempeñar un papel en nuestro hogar a 380/220 V (voltios), unas estaciones transformadoras reducen su tensión. Finalmente la corriente llega a los conductores de los circuitos de nuestras viviendas a través de grandes líneas de transporte aéreas y cables subterráneos.

Ya en nuestra casa, la energía eléctrica se distribuye a través de los conductores de fase y neutro, que la llevan hasta las salidas, bases para enchufes e interruptores. Pero es necesario que el circuito acabe con una toma de tierra para que cumpla las garantías necesarias. La toma de tierra impide que los electrodomésticos y los distintos aparatos queden cargados de electricidad y nuestro cuerpo, al tocarlos, se convierta en un perfecto conductor de la electricidad hacia el suelo.


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jueves, 26 de junio de 2014

Mesa plegable

Hoy hay muchas tiendas que ofrecen solución a cualquier idea que tengamos, por rara que sea. En cuestión de mobiliario, todo se puede fabricar, solo tenemos que proponerlo.

Pero en esta solución no conseguimos la satisfacción de poder decir "he sido yo". Así que, si estamos seguros de lo que queremos, sabemos cómo hacerlo y vamos a disponer de tiempo suficiente para llevarlo a cabo, adelante.

Mesa plegable

Por ejemplo, vamos a fabricarnos una mesa plegable. Necesitamos una superficie plana para trabajar o para estudiar y no disponemos de demasiado espacio. También queremos que sea económica, además de que resulte fácil y que no abulte demasiado. Nos aseguramos de tener todo lo que vamos a necesitar y empezamos:

La hacemos con un tablero de la medida que más nos convenga y una cadena gruesa y fuerte. Lijamos y barnizamos la tabla y sujetamos la cadena a cada uno de los extremos y también a unos ganchos en la pared.

Uno de los lados largos del tablero irá sujeto a la pared, o a un listón que hemos atornillado en ella, con dos bisagras. Ya tenemos una mesa plegable, fácil y rápido.


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lunes, 12 de mayo de 2014

Pulir los cristales

A la hora de utilizar los cristales, el pulido es un trabajo necesario. Después de haber cortado un cristal, los cantos que quedan son muy peligrosos.

Nunca debemos cortar un vidrio y dejar los cantos que queden sin lijar. Los lados irregulares del cristal serán muy problemáticos en el traslado y cuando queraemos ponerlos en marcos de ventanas y puertas. Está claro que cuanto más a la vista esté el cristal, más nos debemos emplear en que el pulido sea de mayor calidad.

Papel de carborundo para lijar los cantos del vidrio

Para pulir el cristal colocamos un papel de lija áspero en un taco de madera y lo pasamos por los bordes del cristal con firmeza, pero sin brusquedad. Para realizar este movimiento tomamos un ángulo de 45º con respecto a la arista y siempre en el mismo sentido.

Debemos mantener siempre la lija mojada; para ello tenemos preparado un recipiente con agua en el que podamos sumergirla con frecuencia.

Cuando veamos que los bordes del cristal van puliéndose, vamos sustituyendo la lija por otra más fina hasta llegar a conseguir el resultado que buscamos.

Esta misma operación se puede realizar con una piedra especial de carborundo (un carburo artificial de silicio, de gran dureza, próxima al diamante, por lo que se usa para pulir), sumergiéndola en agua con regularidad.


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lunes, 14 de abril de 2014

Reparar la plancha

La plancha puede ser un ejemplo de los electrodomésticos que, cuando se estropea, vale más comprar otro que reparar. Sin embargo, es posible que podamos arreglarlo nosotros mismos sin necesidad de acudir a un profesional.

Si la plancha no funciona tendremos que pensar en la posibilidad de que fallen las conexiones; comprobamos el enchufe con otro aparato que tenga un rendimiento correcto. Bien, sigue sin funcionar, vamos al aparato.

Arreglar la plancha

Primero abrimos la tapa tras la que se alojan los cables, en la parte posterior. Con una lámpara de prueba conectada a sus bornes verificamos que la corriente se abre paso a través de los conductores y que, por lo tanto, el problema no está relacionado con el cable. En caso contrario lo sustituimos por uno nuevo de iguales características.

En las planchas más antiguas podemos acceder a la resistencia quitando la suela y el envolvente que la cobija. Desconectamos las conexiones con el termostato y los conductores, y retiramos la lámina que protege la resistencia. Por último limpiamos la suela y ponemos una nueva restableciendo las conexiones como estaban antes de la operación.

Para evitarnos reparaciones debemos tener en cuenta que las resistencias de las planchas son bastante sensibles y, por tanto, es necesario un buen mantenimiento del aparato en cuestión, además de evitar que reciba golpes fuertes.

Comprobado que el cable y el enchufe funcionan bien, lo más probable es que la avería se deba a un mal funcionamiento de la resistencia. Si es una plancha moderna, seguramente tendremos que cambiar toda la pieza donde está la resistencia. Si es así hay que asegurarse de que la resistencia nueva es compatible con la plancha y que, al montarla, queda aislada de cualquier parte metálica por donde podría conducirse la electricidad.


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martes, 25 de marzo de 2014

Cuidados para el suelo

El suelo es una parte de nuestro hogar que se estropea fácilmente. Recibe pisadas, soporta el peso de los muebles y de todos los que pasan sobre él... por este motivo tenemos que cuidarlo y aplicarle una serie de tratamientos que le ayuden a recuperar el aspecto brillante del primer día. Aunque los tratamientos para la conservación de los pavimentos suelen ser bastante caros, los que indicamos a continuación son de lo más rentables.

Si el suelo que queremos tratar es de terrazo o mosaico no debemos aplicarle nunca bajo ningún concepto salfumán, lejía o cualquier otro producto ácido. Con ellos, las baldosas y la pasta de rejuntado se dañan hasta tal punto que los efectos puede ser irreversibles. Si las baldosas de cerámica no están vitrificadas, las podemos lavar en primer lugar con ayuda de un trapo húmedo y vinagre, y una vez hecho esto, con agua jabonosa.

Cuidados para el suelo

La mejor forma de cuidar los suelos de terrazo es aplicando cera a la silicona; con ella ganaremos un gran brillo en nuestro suelo. Para el cuidado diario tendremos que barrerlo y pasar la mopa humedecida en algún producto que capte el polvo (antiestático). De vez en cuando, un lavado con la mezcla de agua y un detergente neutro, puede ayudarnos también a conservar el suelo en buenas condiciones.

Con los pavimentos de gres, semigrés o las baldosas cerámicas vitrificadas ocurre justo al contrario. Es recomendable el uso de detergentes ácidos y agresivos. Aunque son materiales muy resistentes y duraderos, los golpes fuertes es algo que no toleran, pues las baldosas se rompen.

Si cuidamos estos suelos, los tendremos por mucho tiempo y en muy buen estado. Evitaremos utilizar elementos afilados o punzantes para no rallar la superficie ni estropearla. Cada par de años tenemos que repasar el sellado de las juntas con silicona. De este modo lo mantendremos cuidado de la constante humedad y garantizamos su impermeabilidad.

Hoy en día son muchos los hogares en los que los suelos son de madera. Hay muchos materiales sintéticos que la imitan, pero el suelo de madera 100% requiere de unos cuidados mucho más específicos. En primer lugar, para mantenerla en buen estado es importante que dejemos algún tipo de ventilación para que se airee la madera. El contacto permanente con la humedad es también muy dañino para el suelo, al igual que dejarlo expuesto por mucho tiempo a los rayos del sol.

Si se trata de madera barnizada no podemos utilizar agua caliente para limpiarlo, sino hacerlo con una fregona muy escurrida. Por otro lado, si la madera está encerada, siempre la limpiaremos en seco. No se utilizan detergentes; para recuperar el brillo, en el caso de que este se vaya perdiendo, se vuelve a encerar.


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lunes, 10 de marzo de 2014

Limpiar pinceles y rodillos

Cada vez que vamos a pintar y cogemos las brochas y los rodillos vemos que están prácticamente inservibles. La pintura se queda adherida a ellos y se reseca de tal manera que es muy difícil utilizarlos. Para que esto no vuelva a ocurrir vamos a indicar cómo limpiarlos y conseguir que duren mucho más de lo que imaginamos.

Una vez hemos acabado de pintar debemos limpiar las brochas y rodillos. Algunos de estos utensilios incluyen detalles de cómo limpiarlos en los envoltorios, sólo tenemos que prestarles más atención y leer el apartado de conservación. Al leer los envoltorios no solo averiguaremos cómo limpiar los pinceles, brochas y demás, sino que también descubriremos qué tipo de diluyente es el adecuado para cada pintura.

Limpiar pinceles y rodillos

Para limpiar las brochas y rodillos del esmalte podemos emplear aguarrás, parafina, trementina u otros disolventes universales. Por otra parte, para eliminar los restos de pinturas plásticas o con aceite, basta con agua para limpiarlos, aunque antes es importante que los escurramos bien presionando con ayuda de un trapo viejo. Siempre que presionemos con el trapo debe realizarse un movimiento desde la base del pincel hasta los extremos, para no dañar las cerdas. Se trate de la pintura que se trate, es aconsejable finalizar limpiando con agua y jabón convencional.

Con los rodillos ocurre exactamente lo mismo. Tenemos que averiguar qué tipo de disolvente es el que le corresponde a la pintura empleada y limpiarlos antes de que se reseque la pintura. Acabamos lavándolos con agua y jabón para que queden totalmente limpios y se dejan secar. No se tienen que apoyar sobre el rodillo, o la parte que sufra mayor presión quedará aplanada y no esparcirá bien la pintura sobre la superficie.

Una vez hemos limpiado las brochas, para que se conserven mejor, las tenemos que colocar de forma que no se apoyen sobre las cerdas. Por este motivo, es preferible colgarlas en algún clavo ya que; la gran mayoría incluyen un orificio en el mango por el que se suele pasar un cordón. Sólo cuando veamos que la pintura está muy endurecida y no se va, podemos recurrir a sumergir los utensilios en decapante, aunque será sólo unos minutos.


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miércoles, 26 de febrero de 2014

Trucos de ahorro doméstico

En los tiempos de crisis las costumbres de la sociedad están cambiand porque que necesitamos adaptarnos a esta situación de escasez. Para conseguir ahorrar un poco en lo que al hogar se refiere hay una serie de trucos o consejos que pueden ayudarnos. Algunos pueden resultar obvios, mientras que otros no nos los habremos planteado nunca y pueden sernos de lo más útiles.

Para un ahorro en lo que a agua se refiere, podemos colocar una pequeña botella de plástico llena dentro de la cisterna del WC, de este modo conseguimos no desperdiciar tanta agua cuando tiremos de la cadena. Si tenemos un jardín o una terraza con muchas plantas, podemos dejar un recipiente de abertura ancha para aprovechar el agua de la lluvia y regar con ella las plantas de nuestra casa.

Trucos de ahorro doméstico

En cuanto a la luz, siempre que tengamos electrodomésticos o aparatos en "stand by" estarán consumiendo electricidad de una manera absurda; es mejor que los apaguemos y los volvamos a conectar cuando los necesitemos.

Tampoco es necesario que llenemos la despensa hasta los topes, muchas de las cosas que solemos comprar son auténticos caprichos que van sumándose al ticket y son pequeños gastos que, a la larga, nos suponen una cifra considerable. Del mismo modo, cuando sobre comida, siempre podemos guardarla y volver a comer otro día o dársela a aquellos que realmente la necesitan.

Si instalamos cristales dobles que aíslen del frío ahorraremos mucho más de lo que imaginamos en electricidad, pues todas las estufas, radiadores y sistemas de calefacción suelen ser los causantes de los grandes recibos de invierno.

En caso de que algún electrodoméstico se rompa, es recomendable que lo llevemos a reparar pues, a diferencia de antaño, puede resultarnos mucho más rentable una reparación que una nueva compra. Incluso si investigamos un poco por la red es probable que encontremos el fallo del electrodoméstico, tutoriales o experiencias con las que nos enseñan a repararlo sin tener que gastar más dinero que lo que pueda valer una determinada pieza.

Del mismo modo que con los electrodomésticos, la ropa también la podemos arreglar, y no está bien ir tirando prendas que todavía podemos usar. Es el momento de empezar a pensar en estos pequeños detalles que pueden ofrecernos un respiro frente a los grandes gastos a los que tenemos que hacer frente.


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miércoles, 12 de febrero de 2014

Quitar arañazos de los muebles

Hoy revelamos algunos de los trucos caseros más valiosos. Esos remedios que todas las personas mayores conocen y que se están perdiendo con las últimas generaciones. Igual que hace muchos años, son muchos los muebles de madera que tenemos en casa y siempre aparecen algunos arañazos o daños en su superficie.

Es algo completamente normal, pues como todo, se estropea con el paso del tiempo. Pero no por este motivo debemos conformarnos con los muebles así, sino que podemos utilizar algunos de los siguientes trucos para repararlos.

Quitar arañazos de los muebles

Si tenemos pequeñas grietas en algún mueble, puerta o marco de madera, podemos crear una pasta casera de plastilina blanca y azafrán. Para conseguir el tono de nuestra madera tendremos que ir aumentando o disminuyendo la cantidad de azafrán. En caso de no conseguir el color que necesitamos, siempre podemos añadir unas gotas de tinte oscuro.

Para acabar con los arañazos en superficies como espejos, mesas, armarios o cualquier otro mueble de madera hay una serie de trucos caseros. Uno de ellos consiste en mezclar aceite de oliva junto con pasta dentífrica. Para poder eliminar el arañazo solo tendremos que aplicar la mezcla con un paño, esperar unos minutos y retirar con otro paño limpio.

Si tenemos un mueble dañado que es de color oscuro, otra opción para reparar sus golpes y daños superficiales es añadiendo café soluble al limpiador habitual. El café actuará como reparador y a la vez que limpiamos el mueble, se irá restaurando y cobrando una mejor apariencia.

Aunque hay otra forma más inmediata de acabar con los arañazos. Se trata de frotar dientes de ajo en la zona afectada hasta que se cubran las hendiduras. Tras dejar que el ajo se seque, se eliminan los restos sobrantes con un paño y se le aplica cera al mueble.

Aunque puedan parecer remedios algo extraños, son los trucos caseros que ya se utilizaban hace años y han servido para reparar muebles en más de una ocasión. Solo tenemos que escoger el método que más sencillo nos parezca y comprobar los resultados con nuestros propios ojos.


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miércoles, 29 de enero de 2014

Dividir ambientes

Si queremos dividir ambientes, un tabique de una altura de 1.80 m, aproximadamente, nos separará dos habitaciones. Pero evitaremos los ruidos y conseguiremos más independencia si lo prolongamos hasta el techo con cristal transparente. Así no perderemos la luz natural que pasará de una habitación a otra.

Si la división la hacemos en una zona oscura, en lugar de tabique, recomendamos utilizar una mampara de cristal translucido o mateado. Deber ir del suelo al techo y enmarcado en una estructura de madera. Servirá de división y no quitará luz.

Dividir ambientes

Los tabiques construidos con pavés (ladrillos de cristal) son muy decorativos. Trasparentes o traslucidos, en una gama amplia de colores, los últimos imitan los acabados de mármol. Para separar una cocina de un comedor, no tenemos que hacer todo un tabique completo; formamos unas piezas verticales de suelo a techo alternadas con pared lisa, donde podremos poner cuadros.

Una forma de marcar la separación de los ambientes es utilizando diferentes acabados en las paredes. Se puede pintar el salón en un tono más suave y relajado y el comedor puede tener colores más alegres y luminosos. Podemos utilizar un papel pintado formando un zócalo con greca.

Otra solución a la hora de diferenciar ambientes es empanelar las paredes de la zona del salón. Si utilizamos una madera clara no nos agobiará. Conseguiremos dar un ambiente más cálido y acogedor en la zona de estar. Además debemos tener en cuenta que la madera en la pared es aislante.

Podemos dividir ambientes con el panel japonés, que es un carril corredero con varias piezas, también puede servir para ventanas. Podemos utilizarlo de telas o de fibras vegetales (dependiendo del resto de la decoración).

Para separar sin dividir la zona de comer de la cocina podemos utilizar una celosía de cuadricula en madera de las que se pliegan tipo bombo. No es necesario que llegue al techo, puede tener 1,50 cm de altura total.

En una vivienda pequeña, un apartamento o en un estudio, es preferible crear divisiones con elementos más ligeros. En lugar de tabiques, que quitan mucho espacio, podemos independizar la cama con unas cortinas o estores que la oculten cuando nos interese.

Al final lo que más diferencia las estancias es el suelo. La madera es cálida y encajará perfectamente en la zona de estar. El gres quedará mejor en la parte de comer y se limpia mejor.


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jueves, 16 de enero de 2014

Fuera manchas difíciles

En remedios naturales y autosuficiencia también podemos dar algunos consejos para quitar las manchas y los roces que se resisten en joyas, metales y bisutería.

Para quitar las manchas del cobre mezclamos dos cucharadas de bicarbonato, una de sal y un litro de agua.

Fuera manchas difíciles

Podemos limpiar la plata con yogurt y después aclararla.

Para limpiar el ámbar, colocamos el objeto en una caja con piedra pómez y removemos hasta que quede limpio.

Si las pulseras y collares de nácar están muy sucias, podemos limpiarlas con una mezcla de agua y polvos de talco.

¿Y para limpiar el collar de coral, recuerdo de nuestras últimas vacaciones? Utilizamos agua jabonosa y, una vez aclarado, lo ponemos en un cuenco con agua y un puñado de sal. Secamos con un secador.

Limpiamos el oro introduciéndolo en un litro de agua que hierve con un cuarto de amoniaco.

Podemos limpiar pulseras y anillos sumergiéndolos en agua con sal marina disuelta.

Para limpiar carey, en pulseras y anillos utilizamos un trapo humedecido en una mezcla hecha con una cucharada de agua, otra de amoniaco y otra de bicarbonato. Lo dejamos secar.

Para limpiar las sartenes por dentro utilizamos agua y jabón. Luego las frotamos con vinagre caliente. Podemos quitar las manchas de óxido con aceite de oliva.

Para limpiar metales como la base de la plancha se pasa por ella un cabo de vela cuando esté templada. Frotamos con un trapo. También se puede limpiar con un estropajo de esos que llevan detergente incorporado.

Si queda almidón en la plancha frotamos la base de la plancha cuándo aún está caliente con un trapo y aceite de oliva.

Para borrar las huellas que quedan en los marcos dorados limpiamos aplicando claras de huevo a punto de nieve; las dejamos secar y frotamos con una gamuza.


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jueves, 19 de diciembre de 2013

Si entra agua por la ventana

¿Qué hay que hacer si en tiempo de lluvias observamos que alguna de las ventanas de madera en casa deja colar el agua?

Primero tendremos que localizar el punto de entrada del agua. Después necesitaremos una rasqueta o un cuchillo de hojas intercambiables, un cepillo metálico y un pincel. También vamos a necesitar aceite de linaza, una aguja de hacer media o un trozo de alambre y un bote de pintura del mismo color que la ventana.

Si entra agua por la ventana

Cuándo la filtración proviene del marco de los cristales y del sitio donde el yeso ha caído o simplemente se ha rajado, hacemos caer el resto débil y rascamos todo el yeso viejo que queda. Después cubrimos todo el trozo implicado con aceite de linaza y lo dejamos secar durante algunas horas.

Ponemos la mezcla nueva sobre los trozos que han quedado sin yeso y los igualamos con la rasqueta.

Generalmente, las ventanas tienen tres canalones para hacer circular el agua; tienen que estar limpios y sin que haya ninguna basura que los pueda obstruir para que el agua pueda circular hacia fuera. Los limpiamos con el cepillo metálico y pasamos un trapo para repasar la faena.

El agua que circula por el canalón sale al exterior por dos agujeros que atraviesan la madera de lado a lado. Se pueden embozar, con lo cual lanzan el agua hacia dentro. Usaremos una aguja de hacer media o un trozo de alambre para desembozarla.

Si la madera de las partes bajas tiene grietas, cepillamos con energía los trozos dañados con el cepillo metálico, para rascar la pintura agrietada y, seguidamente, lo recubrimos con una capa de aceite de linaza para alimentar la madera.

Esperamos a que se seque el aceite y, entonces, le ponemos más yeso con una rasqueta de hojas intercambiables o con un cuchillo. Acabamos la operación con una capa de pintura o de barniz encima de las zonas que ya han sido arregladas. Cuándo se haya secado la primera capa, damos otra para dejar impermeabilizada la madera.


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jueves, 5 de diciembre de 2013

Chapuzas de electricidad

No está de más que recordemos que no se debe hacer ninguna reparación eléctrica sin cortar antes la corriente general de la casa. Si queremos hacerlas con luz, es mejor que sea de día.

Tomamos nota y para no equivocarnos si tenemos que comprar una pieza nueva (casquillo, enchufe, interruptor), nos llevamos la antigua como muestra. Hay infinidad de modelos y es bastante fácil que nos equivoquemos. Así ahorraremos tener que cambiarla.

Chapuzas de electricidad

Cambiar el casquillo de una lámpara instalada en el techo no es fácil. Si tenemos que hacerlo, lo prepararemos antes de subirnos a la escalera, instalándolo en un trozo de cable. Y así una vez arriba solo tendremos que hacer los empalmes.

Si nos hemos quedado sin cinta aislante y tenemos que hacer una reparación de urgencia, podemos sustituirla por un poco de esparadrapo, pero que no se nos olvide cambiarla cuanto antes.

Una de las precauciones elementales para manejar cualquier aparato eléctrico en casa es hacerlo con las manos secas, pues de lo contrario corremos peligro de sufrir una descarga eléctrica.

Cuando vayamos a comprar las herramientas, debemos recordar que estas han de tener siempre el mango aislante. Se manejan mejor y así se evitan posibles accidentes.

Si tenemos que colocar varios aparatos en un mismo enchufe, podemos utilizar el ladrón. Pero no soportan demasiada corriente y pueden llegar a quemarse. Si nos parece que no va a tener potencia suficiente o tienen que estar enchufados siempre, compramos en una tienda de electricidad uno de listón de los que se suelen utilizar en las oficinas, pues son más resistentes.

Para cambiar el cable de una lámpara, si atamos el nuevo al anterior va a ser más rápido. Al sacar el viejo, el mismo va a dejar el nuevo colocado en su sitio.

Al clavar en una pared, siempre se corre el riesgo de agujerear un cable y acabar haciendo un estropicio. Si nos fijamos en la situación de los enchufes y los interruptores, tenemos una guía, lo más normal es que el cable vaya de uno a otro.

Cuando vayamos a instalar un aparato eléctrico, hay que leer bien las instrucciones, pues muchos de ellos necesitan un enchufe con toma de tierra. Es peligroso colocarlos en los que no la tengan.

Hay que vigilar los enchufes, si se calientan o tienen alrededor un cerco oscuro, se debe desconectar inmediatamente la corriente y desenchufar el aparato que está instalado en él para revisarlo. Generalmente son avisos de un fallo.


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lunes, 18 de noviembre de 2013

Corte de cristales en círculo

Si queremos cortar un cristal en círculo, cuándo sepamos el diámetro del círculo a trazar lo marcamos con un rotulador. A continuación, fijamos el corta vidrios de compás colocando la ventosa en el centro del diámetro y lo regulamos para obtener la distancia de radio adecuada.

Hacemos la marca del perímetro de la circunferencia con una presión uniforme y una sola vez, sin parar, regulando el corta vidrios de compás a menor distancia. Paulatinamente, vamos haciendo distintos círculos concéntricos. Son los llamados círculos de seguridad.

Cortar cristales en círculo

Utilizamos ahora el corta vidrios normal para hacer cortes radiales desde el centro del círculo hasta la circunferencia exterior. De esta manera haremos una especie de red que facilitará el cortado.

Con la ayuda de las hendiduras del corta vidrios y de unos alicates vamos eliminando el circulo interior desde el centro, para llegar al exterior y definitivo.

Si queremos cortar un circulo de cristal, es decir, conservar el disco interior, debemos realizar una operación parecida a la anterior pero a la inversa. Una vez trazado el círculo, utilizamos el corta vidrios para hacer cortes tangenciales que vayan desde el perímetro hasta los bordes del cristal. Ahora podemos retirar estas partes con golpes suaves y haciendo presión.


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martes, 5 de noviembre de 2013

Cambiar un interruptor

Nos podemos ahorrar mucho dinero (y en estos días es conveniente) si sabemos hacer las chapuzas de casa. Aquí ya aprendimos a cambiar un enchufe; ahora nos toca ver cómo se cambia un interruptor.

Si queremos cambiar un interruptor porque no se activa el paso de la corriente al presionarlo, primero debemos asegurarnos de que la avería se debe a la pieza.

cambiar un interruptor

Con un comprobador de pilas podemos averiguar el funcionamiento del interruptor. Si se calienta, zumba o tiene algún otro tipo de problema, debemos remplazarlo una vez que hayamos comprobado que los tornillos de los conductores están bien sujetos y la instalación bien realizada. No sea que funcione porque los conductores no están bien seguros en su posición.

En caso contrario, sustituiremos el interruptor por uno adecuado a la tensión que vamos a manejar, desconectando el interruptor general o de circuito, así trabajaremos en una línea libre de tensión. Según sea, abrimos o desatornillamos el interruptor y nos fijamos en cómo están hechas las conexiones. Después tendremos que volverlas a hacer.

Sacamos el interruptor de la caja de la pared y desalojamos los conductores de los bornes. Ahora ponemos los conectores en los bornes del interruptor nuevo; ponemos el conductor bajo tensión en el borne marcado con una P. El que sirve de prolongación bajo tensión se introduce en el que está marcado con una flecha. Las señales pueden cambiar, por eso es importante que nos hayamos fijado en cómo estaba realizada la instalación, para que el interruptor se apague y se encienda en la misma posición.

Atornillamos, si es el caso, el interruptor a la pared. Y si lo instalamos en mitad de un cable, por ejemplo de una lámpara, seccionamos el cable y pelamos una pequeña extensión de los conductores para hacerlos pasar por los bornes.


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lunes, 7 de octubre de 2013

Cortar cristales

Antes de empezar: siempre que trabajemos con cristales es imprescindible el uso de protecciones en manos (guantes) y ojos (gafas protectoras). Nunca pasa nada hasta que ya es tarde.

Hay diferentes formas de cortar el cristal, diferentes técnicas para hacerlo. La más corriente es el cortado básico. Nos fijamos en la herramienta, el corta vidrios tiene una pequeña rueda que produce la marca al girar. Es importante que tengamos siempre esta rueda lubrificada con agua, aceite o aguarrás; no debemos olvidar la punta de las herramientas.

Cortar cristales

Con un metro metálico tomamos las medidas de la superficie que queremos cortar. Nos será muy útil la regla en "T" para trasladar las medidas al cristal y guiar el corte.

Mientras realizamos la marca en el cristal con el corta vidrio,s debemos aplicar una presión firme y constante en posición vertical, perpendicular al cristal.

Con la marca hecha, situamos el cristal en el filo de la mesa, para que al presionarlo con las manos se quiebre por la línea. Siempre con guantes. Para ayudar al inicio del corte, podemos dar un ligero golpe con el corta vidrios por abajo, en el borde del cristal.

Con los alicates rematamos los bordes y nos aseguramos de que quedan bien parejos, ya que si el borde estuviera torcido, no sería fácil que encajase después en el marco de la puerta o ventana donde lo vayamos a colocar.


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lunes, 23 de septiembre de 2013

Colocar las bisagras de una puerta

Esto nos va a servir tanto si es una puerta nueva como si tenemos que sustituir las bisagras de una vieja.

Antes de empezar debemos asegurarnos de que la puerta tiene una holgura de seis milímetros en la parte inferior y de tres en los restantes; si tiene estos ajustes respecto a su marco podemos colocar las bisagras que soportarán la puerta.

Colocar las bisagras de una puerta

Colocamos la puerta calzándola con cuñas hasta que ocupe su posición correcta. Medimos la altura de la puerta y la dividimos entre siete para obtener la distancia que guardarán las bisagras respecto a los extremos superior e inferior de la puerta. Primero se colocan las bisagras en la puerta y luego en la parte vertical del marco (en la jamba).

Marcamos el perfil de la bisagra y lo cortamos con el escoplo o formón, utilizando la herramienta en sentido vertical. Hacemos varios cortes superficiales para vaciar, mejor que uno y grande. Al final, el rebaje que hemos hecho ha de tener la profundidad del grueso de la pala.

Eliminamos el sobrante mediante cortes horizontales a lo largo de la línea de profundidad y taladramos los agujeros para los tornillos con los que fijaremos las bisagras. Los apretamos fuertemente.


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martes, 10 de septiembre de 2013

Construir un cobertizo

Antes de decidirnos a comprar un cobertizo prefabricado conviene estudiar la posibilidad de construirlo uno mismo. Un cobertizo bien hecho, con un armazón de madera de segunda mano recubierto de tablas y revestido de alquitrán por fuera, es bastante bueno.

Un diminuto cobertizo para guardar los aperos es mejor que nada, pero si disponemos de espacio y dinero, o de tiempo para hacerlo uno mismo, es mucho mejor construirlo grande, en el que poder guardar las herramientas, pero mejor aún si podemos almacenar en él hortalizas, patatas, semillas, judías secas e incluso ristras de cebollas y ajos.

Construir un cobertizo

Para el tejado podemos utilizar fieltro o cualquier otro tejido tratado con una sustancia bituminosa, que contenga betún en su composición, ya que la característica de él que más nos interesa es la impermeabilidad. Y siempre nos valdrá menos que comprar la plancha ondulada.

Otro sistema de techado que da buenos resultados es colocar una plancha vieja de hierro ondulado en la que se han hecho agujeros. Se colocan encima sacos de plástico superpuestos de manera que quiten el agua que caiga. Se cubre todo con otra plancha de hierro ondulado y se clava todo. Se pinta la parte exterior con el material bituminoso. Este tejado quedará aislado y dura mucho tiempo, aunque no resulte muy atractivo a la vista.

Lo más importante para cualquier construcción de madera es tener seca la base. No debe ponerse la madera directamente sobre el suelo. Conviene poner el cobertizo sobre pilares de ladrillo o de hormigón y colocar algún material o revestimiento que evite la humedad o las filtraciones. Lo mejor es hacer un piso de hormigón y montar encima el cobertizo.

En los climas muy fríos conviene aislar el cobertizo, si queremos resguardar patatas o cualquier hortaliza. Lo ideal es la fibra de vidrio, igual a la utilizada en desvanes y alrededor de los depósitos de agua caliente, pero es cara. Un sistema que no cuesta nada es montar con sacos de plástico un techo y unas paredes falsos. Esto crea una cámara de aire entre las paredes exteriores y la capa de plástico, siempre que no haya hendiduras en el plástico. Este tipo de aislamiento es muy eficaz.


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jueves, 29 de agosto de 2013

La ducha no funciona

Es más barato ducharse que llenar la bañera. Normalmente, una ducha se hace con 25 litros de agua; en cambio, para llenar la bañera necesitamos de 100 a 150 litros.

Es recomendable revisar nuestra ducha para asegurarnos que funciona bien. De esta forma, podremos formar parte de los que "mejor se dan una ducha rápida", eso sí..., a diario ¿vale?

La ducha no funciona

Necesitamos un destornillador medio, unos alicates graduables, un cuchillo y una llave inglesa. Utilizaremos vinagre y una aguja de cabeza. Si el cuero de los grifos está gastado, tendremos que cambiarlo. Lo encontraremos en cualquier tienda de artículos sanitarios. Necesitaremos, también, un trozo de alambre rígido.

Cuando el agua sale mal por la ducha, quiere decir que los agujeros de salida están obstruidos por el oxido. Para deshacerlo, ponemos el teléfono (o perilla) de la ducha durante una o dos horas en un recipiente con vinagre caliente. El ácido disolverá, o ablandará, el óxido. Repasamos, uno a uno, los agujeros con una aguja de cabeza. Para dejarla bien, aclaramos durante un rato la ducha.

Si abrimos la ducha y el agua cae a lo largo del tubo, lo desmontamos aflojando las anillas que hay a cada extremo. Las dejamos en un sitio que recordemos, pues siempre se pierden. Sacamos las piezas de plástico que sujetan el tubo de goma (con la punta de un cuchillo) y las cambiamos por nuevas.

Si la ducha tiene una fuga de agua y los grifos están cerrados, deducimos cual es el grifo que pierde, comprobando si es agua caliente o fría, y cambiamos el cuero del grifo.

Cuando el agua queda estancada, sacamos y limpiamos la rejilla que protege el agujero de desagüe. Si hace falta, con cuidado, podemos utilizar un alambre rígido y sacar lo que nos haya hecho de tapón en el tubo.


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jueves, 11 de julio de 2013

Poner cristales nuevos

Antes de poner cristales nuevos retiramos los restos del viejo que sigan sujetos a los bordes. Es posible que, además, tengamos que quitar algunos restos de masilla de la que sellaba el cristal anterior. Para ello nos armamos de un martillo y un cortafríos. También necesitaremos la ayuda de unas tenazas para arrancar los trozos que estén clavados en el marco. Cepillándolo al final, dejamos el marco libre de astillas y podemos ya poner cristales nuevos.

Empezamos midiendo las diagonales de los marcos y la profundidad de los carriles; nos aseguramos de lo que nos va a ocupar el cristal. Cuando encarguemos el corte del cristal, las medidas serán algo menores para facilitar la dilatación.

Poner cristales nuevos

Preparamos la masilla. Si está muy húmeda, la envolvemos un rato en papel de periódico, que absorbe algo el aceite; si está muy seca la podemos ablandar, mientras la amasamos, con aceite de linaza. Colocamos la masilla con el dedo pulgar a lo largo de toda la ranura, en forma de banda continua y estrecha (unos 3 mm).

Colocamos el cristal, primero por el lado inferior y luego por el superior, y lo presionamos hasta dejarlo bien asentado y apoyado en el resto del marco.

A continuación ponemos el marco de la ventana, dejando un espacio de 2 mm por detrás del cristal. Con una espátula retiramos la masilla sobrante.

Ahora es el momento de clavar el marco. Lo hacemos en paralelo a la hoja, a una distancia de 1,5 cm., y aplicamos más masilla en la parte exterior de la hoja. Solo queda esperar tres semanas hasta que la masilla endurezca y permita pintarla.


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