De un pollo entero podemos hacer tres comidas. Aprovechando las pechugas podemos hacer un rico pastel de pollo. Con los huesos que quedan después de limpiar y separar las pechugas, el cuello del pollo y algunas verduras, hacemos caldo para una sopa y nos sirve para un primer plato en una cena o una comida, si nos apetece un caldo ligero. Con el resto del pollo podemos hacer un sabroso pollito en salsa.
Hacen falta seis pechugas de pollo deshuesadas. Las hervimos en agua con apio y puerro. Quedará un caldo de ave que haremos con las mismas pechugas. Podemos aprovechar este caldo para hacer sopa para cuatro, hirviendo dos puñados de pasta por persona en un litro del caldo resultante.
Necesitamos 100 gr. de bacón y 100 gr. de queso emmenthal rallado, una lata de foie-grás trufado, una taza de harina, mantequilla, agua y sal.
En una fuente que se pueda poner en el horno hacemos una cama con bacón, sobre esta ponemos las pechugas de pollo escurridas de caldo con una bechamel. Para hacer la bechamel necesitamos la harina, la mantequilla y el foie-gras. La podemos hacer como aprendimos en el articulo "cocinar en tiempos de crisis".
Lo espolvoreamos con queso rallado y lo gratinamos en el horno, sirviéndolo en la misma fuente del horno a la mesa, ya que, para que sea rico, tiene que estar caliente.