Os pedimos que penséis tres marcas. Quizás alguna de ellas sea Apple, Coca-Cola o Google; limitadas a España, Zara, BBVA, El Corte Inglés... Estas son las marcas que lideran los rankings de valoración, las que todos consideramos cool o relevantes. ¿Y por qué estas y no otras? ¿Que tienen que las hace "marcas amadas"? Primero, todos son un gran producto, un producto único.
Detrás de una buena marca no solo debe existir un producto de calidad. La marca debe ser portadora de significado. Vende la experiencia de consumo, la emoción. Hay una conexión entre marcas y experiencias, por ejemplo "el placer de conducir" con BMW, o "disfrutar de la vida" con Coca-Cola.
Un producto que revolucionó las cocinas españolas en los años cincuenta, las pastillas de caldo Avecrem, de Gallina Blanca, salió al mercado el año 1954 y ha sabido trasmitir en su comunicación el calor del hogar, es una marca que "conecta".
El neuromarketing estudia la conexión que existe entre marcas y emociones. Asegura que la marca influye más en el consumidor que lo que está viendo este. Se asegura que nos cuesta 2,5 segundos decidir una compra. El 95% de estas decisiones ya están en el subconsciente.
Se ha llegado a saber que un producto caro, por serlo, predispone al cerebro al placer. O que menos de un 2% de las compras se decide por el precio. O que una cuarta parte de los clientes que van a una gran superficie dicen recorrerla entera, aunque sólo sea un 2% los que lo hagan. Y que la mayoría de los compradores adquieren siempre lo mismo, por lo que un nuevo producto será "invisible" para ellos.
En los orígenes del comercio solo había productos. Hoy en día la relevancia de las marcas es un fenómeno creciente.