En la actualidad, es posible recurrir a residencias en las que los enfermos de Alzheimer son atendidos. Para ello debemos primero solicitar un sítio a los asistentes sociales de los centros de salud. Hay tanto residencias públicas como privadas, que disponen de los medios adecuados para atender a las personas con Alzheimer.

Estas infraestructuras asistenciales están indicadas para ayudar a la familia en caso de agotamiento, o cuando el enfermo sufra una desorientación (en el tiempo y/o en el espacio), o bien trastornos en la conducta que le impidan la vida familiar.

En las residencias hay dos tipos de asistencia: el ingreso de forma permanente y el ingreso esporádico. Este último incluye los fines de semana y periodos de vacaciones. Libera así a las familias de tanta presión ante la enfermedad y devuelve cierta calidad de vida a los familiares de los enfermos.

Actualmente no existe cura contra la enfermedad de Alzheimer. Se utilizan medicamentos sólo para aliviar los síntomas. Los avances en este campo están, aproximadamente, a la misma altura que los estudios realizados sobre la curación del Sida y el Cáncer.

Las observaciones demuestran que el Alzheimer no afecta igual a los hombres que a las mujeres. En general, los hombres tienen un mayor riesgo de desarrollar esta enfermedad. En las mujeres, los estrógenos (las hormonas responsables de las características del cuerpo femenino) ayudan a proteger el sistema nervioso frente al desarrollo de la enfermedad de Alzheimer.

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