La columna vertebral es la estructura de apoyo de nuestro cuerpo. En su interior encontramos la médula espinal y los nervios más importantes. Con este ejercicio aliviaremos tensiones y bloqueos en columna y en la zona de la pelvis. Si queremos tener una espalda saludable, es importante mover estas articulaciones y soltar los músculos una y otra vez. Esto se consigue realizando un ejercicio constante.

Por cierto, ¿os habéis fijado en que siempre se repite la palabra "constante"? Con constancia ejercitamos la columna al completo, estiramos la espalda y los glúteos, así como la parte trasera de las piernas. Con estos movimientos también vamos a trabajar el suelo pélvico. En un artículo publicado hace unos meses explicamos unos ejercicios para la columna. Aquí damos unos consejos generales:

Antes de comenzar cualquier programa de ejercicios es aconsejable solicitar el consejo y la aprovación del médico, sobre todo, si hemos tenido cualquier tipo de problema o lesión. Los ejercicios se deben realizar diariamente y, en algunos casos, dos veces al día.

Se puede empezar con dos repeticiones de cada ejercicio e ir aumentando su número progresivamente. También empezaremos con pocos ejercicios y, tal como vayamos notando mas seguridad, aumentaremos la cantidad.

Es conveniente realizar los ejercicios en el suelo o sobre una colchoneta fina y dura. Así se consigue un apoyo correcto sobre la columna vertebral. Debemos adoptar posturas que mantenngan la columna en su eje vertical y coordinar siempre los movimientos con la respiración.

Después de realizar los ejercicios, vamos a dedicarle un tiempo a la relajación de los grupos musculares que hemos trabajado, así como de las zonas que notemos tensas.