Comiendo verduras en ensalada las introducimos fácilmente en nuestra dieta. Las verduras de ensalada son una delicia en los meses de verano y a primeros de otoño, aunque muchas se pueden cultivar también durante el invierno y la primavera. Grácias a nuestra dieta mediterránea, tenemos opciones muy saludables para hacer esquisítas ensaladas.

Por supuesto, muchas hortalizas podrían clasificarse como "verdes" para ensaladas, pero aquí vamos a referirnos a la achicoria, hierba de los canónigos, berros, pepinos, escarola y rábanos.

La achicoria es una útil verdura de la ensalada de invierno que se puede comer cruda o cocida. Se cultiva en dos etapas, una primera que ocupa espacio en la parcela, y la segunda que solo requiere un par de macetas grandes. Esta se llama de forzamiento, y se forman entonces las cabezas lanceoladas de color verde claro que se llaman endivias.

La hierba de los canónigos y la escarola proporcionan también hojas frescas para las ensaladas de invierno, aunque ambas pueden cultivarse en verano. La hierba de los canónigos tiene pequeñas hojas de color verde oscuro, y es una planta pequeña; la escarola es más grande y tiene hojas muy divididas y rizadas, se blanquea para reducir su gusto amargo. Los pepinos requieren un suelo fértil, rico en abono vegetal para huerto.

Los berros necesitan idealmente un arroyo de agua corriente para su cultivo. Aunque se pueden criar en un surco con mucho riego. El berro mastuerzo puede cultivarse dentro de casa. Podemos espaciar la semilla en platos con papel secante humedecida, hojas de papel de cocina, o bien en recipientes poco profundos llenos de turba. Los mantenemos en un lugar oscuro hasta que hayan germinado, y se trasladan después a un alfeizar luminoso. Se cortan y se usan cuando los tallos han alcanzado unos 4cm.

Los rábanos son miembros del grupo de las coles. Los cultivados durante el verano suelen ser redondos con color rojo brillante y blanco. Los rábanos de invierno tienen forma alargada de chirivía y alcanzan unos 15 cm.

Hay otro par de componentes habituales en las ensaladas que no nombramos. Al cultivo de tomates, le dedicamos todo un artículo anterior. En cuanto a la lechuga, vamos a publicar un monográfico dentro de unos días.