Nuestra economía es media, y por ella vamos a luchar con las mejores posibilidades. Como si de una nevera se tratara vamos a comparar el montaje de un armario, aprovechando al máximo las posibilidades de espacio y distribuyéndolo como haríamos con los productos básicos en nuestra cocina.

Un armario bien organizado es un armario ideal y, una economía bien gestionada es una buena economía. Por eso hay que estudiar al máximo las opciones tanto de uno como de otra. Tenemos en cuenta el espacio, procurando siempre que no nos falte nada con lo que básicamente hemos de contar. La ropa necesaria y los alimentos que nuestro cuerpo necesita.

Barras extraíbles en el armario para aprovechar toda su altura y la profundidad, en las que colgaremos ropa más larga y más corta. En cocina sacamos provecho de todos los alimentos, nuestra nevera no está demasiado llena, pero tiene todo lo básico: leche, huevos, fruta, tenemos muy en cuenta nuestra alimentación. Pocuramos estar siempre bien nutridos.

Con mini cajones en el armario, salvamos espacios que quedarían inútiles, para ropa interior, y piezas pequeñas. En la cocina, son necesarias especias y todos lo que nos va a ayudar a dar un punto a nuestros guisos. Sea picante, o dulce…a elegir.

En el armario, vamos a utilizar bandejas extraíbles de madera con separadores para las camisas. Podemos revestir las puertas de tela, decorarlas con cuadros y adquirir útiles bandejas y cajoneras que facilitaran el orden en la casa. En nuestra casa por economía vamos a vigilar las luces. Si no hacen falta no se encienden. ¡Ojo con la factura de la luz!